ZIG ZAG VITAL 2

El barbas, joven inexperto, primo del 68, enfilaba la calle de la Palma, rumbo a una cita desconocida. En su cabeza revoloteaban imágenes -Guinovart, Crónica, Guache, Millares-.

Cambió de acera para esquivar a dos grises y subió las escaleras deteniéndose en el primer piso. A través de la cerradura se podían escuchar entremezcladas das melodías: N.Y. Dolls, Pecos, ¡no podia ser!. Picó y le abrió un ángel rubio sonriente que medio tapaba dos tablas inmensas con Fara y el Sha ¡horror!. El etéreo le cogió del hombro y le condujo ante un tribunal orondo de Costus - Casal rodeado de futuribles pegamoides, rafias Fabio, estrellas underground y perra afgana. Presidiendo la corte un risón Carmen Polo pop, escoltada por dos grandes paneles de marujas flamenconas ¡My God!. El barbudo quedó petrificado y durante cuatro horas no perdió ripio de todas las retahílas de aquellas reinonas adictas a la mesa camilla, salidas del diez minutos.

Al despedirse hasta mañana, un ring-ring de burra hacia Belén le perseguiría toda la vida.

Vivir para hoy.